Los diputados locales volvieron a dar la noticia no por su trabajo legislativo, si no por gastar excesivamente en la logística de sesiones del pleno en otros escenarios que no fue el Palacio Legislativo.

Durante cinco meses el pleno del Congreso del Estado, encabezado por el diputado Eduardo Ramírez Aguilar, sesionó unas siete veces afuera del edificio legislativo. El costo por sesionar en otras instalaciones fue de un millón 62 mil 734 pesos, de ese recurso 380 mil 743 se gastó en cafetería, es decir, café y galletas.

De acuerdo a la respuesta a la solicitud de información realizada al Congreso del Estado de Chiapas, con folio 00392116 el costo por sesionar fuera de las instalaciones del Congreso del Estado del periodo del 15 de Abril al 15 de Septiembre del 2016 fue de más de un millón de pesos.

En servicio de cafetería lo que se gastó fue 380 mil 743 pesos. En servicio de transporte de personal 368 mil 073 pesos y por servicio de fletes por transporte de mobiliario el recurso fue de 313 mil 918 pesos, lo que suma un total de un millón 62 mil 734 pesos.

Sin transparencia en las sesiones

Las pocas veces que sesionaron durante esos meses lo hicieron de manera irregular: en sedes alternas y cuando usaban la sede del Congreso Local era en horas poco habituales como las 6:00 de la mañana o las 10:00 de la noche.

En ese periodo se aprobaron reformas a la constitución; se autorizó que diferentes municipios pudieron solicitar préstamos tanto a la banca pública como privada; se nombraron magistrados y una decena de regidores de distintos municipios presentaron licencia. También se aprobó la cuenta pública del gobierno de Manuel Velasco Coello del 2015.

Lo que se discutió y se aprobó en esas sesiones no se sabe con claridad toda vez que tampoco eran transmitidas en la página oficial y en el portal de transparencia aún no está disponible el diario de debates de esas fechas, pese a que ya debería de estar en línea.

Con información de: Chiapas Paralelo